City Hall

En el Ayuntamiento, los jugadores compiten por convertirse en alcaldes de la ciudad de Nueva York. Lo hacen intentando ser los más exitosos tanto en atraer a la gente a la ciudad como en hacer campaña para obtener la aprobación de los ciudadanos. El que mejor equilibre estos dos objetivos ganará las elecciones.

Hay siete oficinas dentro del Ayuntamiento. Estas oficinas se ocupan de un aspecto diferente de la construcción de la ciudad o de las campañas, como el tasador fiscal, el topógrafo o la junta de zonificación. En una ronda, cada jugador podrá activar una de estas oficinas. Sin embargo, el hecho de que active una oficina no significa que vaya a poder usarla. Los demás jugadores tendrán la oportunidad de usar su influencia para robarte el control de la oficina. Mantenerlo requerirá contrarrestarlo con tu propia influencia. Sin embargo, puedes dejar que otro jugador controle esa oficina esta ronda y añadir su influencia a la tuya, lo que te permitirá controlar las cosas más adelante.

Al utilizar estas oficinas, los jugadores comprarán terrenos y construirán propiedades para crear barrios atractivos que atraigan a la mayor cantidad de personas a la ciudad, o pueden colocar una fábrica junto al complejo de viviendas del oponente para expulsar a la gente. También cobrarán impuestos a sus electores para recaudar fondos (con la opción de sacrificar la popularidad para gravar con tasas más altas), comprar y vender influencia a los grupos de presión y hacer campaña para aumentar su nivel de aprobación.

Al final del juego, los ciudadanos de la ciudad votarán en función del jugador que los haya traído y del nivel de aprobación de ese jugador. Los grupos con intereses especiales también recopilarán votos para los jugadores en función de ciertos objetivos, como que Wall Street apoye al jugador con más dinero. El jugador que tenga más votos el día de las elecciones se convertirá en alcalde de Nueva York y nombrará a sus oponentes para el Departamento de Saneamiento.